El amor es
una palabra que puede tener muchas definiciones y están incluidas las
relaciones con los padres, hermanos, primos, hijos, amigos.
El concepto
de amor, ha sido en muchas ocasiones idealizado y difícilmente descifrable.
Aunque no lo creas, el amor, como casi todas las cosas en esta vida, se
aprende. Y, en momentos, lo asimilamos de forma incorrecta. Y esto afecta a
todas las personas, al tratarse de uno de los sentimientos más potentes y universales
que existen, cada uno le otorga unas características propias y unas ideas que, muchas
veces, no son del todo ciertas.
1- AMOR A PRIMERA VISTA.
El amor es espontáneo, inesperado,
fortuito, impredecible: no puedes controlar de quién te enamoras.
¿Dónde está escrito eso? La
espontaneidad en el amor no es del todo cierta: requiere predisposición por
parte de la persona. El amor no es algo
mágico que sucede sin más, sin que podamos hacer nada por evitarlo. Cada persona
elige de quien se enamora porque, para que en esa relación exista el amor, debe
haber todos esos componentes que no surgen misteriosamente, sino que hay que
trabajarlos y conseguirlos.
A veces el
cerebro juega con nosotros y nos hace creer el que cuando ves a una persona y
sientes una gran atracción por ella, la supones perfecta, sin embargo, a veces
esa elección tiene que ver con un estereotipo de gustarnos la gente atractiva.
O que se hace una asociación de la belleza con la bondad. También cuando se
cree tener esa sensación de amor a primera vista inmediatamente nuestro cerebro
comienza hacer planes mentales de un sinfín de cosas,
Dicen
que cuando tienes la oportunidad de tener un amor a primera vista, todo tu
futuro a lado de esa persona pasa por tus ojos, haces planes mentales de su
primer beso, sus viajes y un sinfín de cosas que sí, suenan demasiado intensas
y aterradoras para quienes somos testigos del escenario desde afuera. Idealización que
nos lleva a un amor romántico, el cual se basa en las ilusiones positivas que
podrían llevarte a una relación duradera.
¿Qué
es el amor a primera vista?
La
mayoría de la gente lo define como un enamoramiento instantáneo de
un extraño que, al verlos por primera vez, te generan una explosión de amor en
el estómago. Los científicos lo definen de una manera más compleja...
Si bien
hay un montón de argumentos en contra, el amor a primera vista rompe
con los esquemas de la Parte de la ciencia detrás de esta escuela de
pensamiento se basa en estereotipos, y uno de los principales
argumentos de la misma, es que justamente no podemos simplemente mirar a
una persona y conocer sus características y enamorarnos, esta
suposición es incorrecta.
Según
la ciencia, el amor a primera vista es conocido también como el “halo
atractivo”, y se refiere básicamente Ojo, esto no quiere decir que estamos
utilizando estereotipo, la imaginación y la asunción de “enamorarnos” puede ser
sincera y sí, súper intensa.
Si bien
el “halo atractivo” se refiere a las personas que son físicamente guapas,
también incluye a otras personas que pueden resultar atractivas por diferentes
razones:
¿Él
o ella se parece a alguien con quien hayas tenido una relación sentimental
antes? ¿Te provoca nostalgia por alguien del pasado? Si
es así, es probable que el “amor” haya sido solamente una conexión subconsciente.
Así es, el cerebro puede haber decidido, sin siquiera consultarte, que esta
persona te recordaba a alguien que te importa / importaba y recordó el impacto
positivo que esa persona tenía en tu vida.
¿Por
qué nuestro cerebro nos engaña? El
hecho de que tu cerebro forme estas conexiones sin que te des cuenta, no
significa que sea tu enemigo. Lo más probable es que el cerebro no pueda
evitarlo… Tenemos la tendencia a relacionarnos con los rasgos faciales
y las características de alguien, así que si inconscientemente encuentras
similitudes, te puedes enamorar del impacto positivo que alguien dejó en ti, a
través de un desconocido que por alguna extraña razón te hace recordarlo sin
que te des cuenta.
Sabiendo
esto, parece más comprensible por qué algunos de nosotros estamos seguros de
que hemos experimentado el amor a primera vista, aunque de antemano, pensamos
que era imposible.
Lo
único malo dentro de todo este rush de romanticismo, es que
las relaciones que llegan a iniciar de esta manera, tienen un potencial de
ruptura más alto y cuando esta falla, nos deja la sensación de que hemos
perdido algo el destino había previsto.
En
resumen: El amor a primera vista es real pero no todo es
miel, perfección y mariposas. No tengas miedo a terminar con esa relación
solamente porque crees que “el destino” te lo puso enfrente.
No
confundas la necesidad de alguien con el amor de alguien. Ahora bien, existe la
posibilidad de que sí lo estés viviendo y si consideras que es así, no tengas
miedo de que te rompan el corazón, no te preocupes por el futuro.
2.- AMAR ES DARLO TODO SIN ESPERAR
RECOMPENSA.
Tenemos un concepto muy equivocado de
lo que es el amor, podemos decir que amar es dar todo por alguien sin esperar
recibir nada a cambio, cuando en realidad si esperamos de los demás, y mucho.
Es muy rara la vez que damos sinceramente sin interés, pero a veces hasta nos
engañamos a nosotros mismos cuando lo que buscamos es reconocimiento. Cuantas
veces al terminar una relación, el afectado se queja de haber sido el que más
dio. Las madres esperan por lo menos un agradecimiento. Muchas veces esperamos
una reciprocidad.
Cuando justificamos diciendo que
hicimos algo por amor (generalmente decimos esto después de causar un daño a
alguien o a nosotros mismos), no lo hicimos por amor, más bien para demostrar a
quien sea cualquier cosa y así manipular situaciones o pensamientos y acciones
de personas.
El amor es mucho más complejo que dar
y recibir, también es mucho más que el "auto sacrificio" por alguien.
El amor es el más puro estado de conciencia, al estar "En Amor" no es
posible el sufrimiento, tampoco es posible la desgracia, el rencor, la tristeza
o el temor, ya que todos estos sentimientos vienen del ego, que es desunión.
3.- ¿Yo te amare por los Dos? O ¿El
Amor lo puede todo?
Quizá “todo” sea generalizar en exceso. El
amor puede con casi todo, pero no con todo. Básicamente puede con las cosas que
se decidan juntos, según lo que se haya aprendido a lo largo de toda la
relación y lo asimilado cada uno por su cuenta. Puede ser que uno de los dos
sea capaz de superar una dificultad que el otro no; por eso es tan importante
la comunicación y la negociación en los momentos de conflicto en la pareja.
Se plantea que el amor es la base
sobre la que se sustenta la pareja, que mientras haya amor no importara las
dificultades que se presenten.
Resulta que conoces a un ser especial
y te enamoras, pasan horas, tal vez días, o un par de semanas y de repente deja
de buscarte, es posible que te pida tiempo para saber que prosigue. Y tú
quieres mantener la relación, dices que no te importa si te quieren, propones
que con el tiempo ganaras su amor.
“He aprendido que no puedo exigir el amor de nadie”
William Shakespeare
Es decir, no puede obligar a que
alguien te quiera, ¿tu serias feliz si alguien te obligara a estar con él y tú
no quisieras? si una parte de la pareja no ama jamás se logrará que ese ame a
la otra persona
Quizá sea el momento de reflexionar
sobre lo que es realmente el amor y no otorgarle falsas creencias. Como el amor
es sufrimiento. Si sufres en una relación no es amor, la finalidad de tener una
pareja es para estar en paz, en crecimiento, en armonía, puede haber pequeños
inconvenientes, desacuerdos, pero no implica llegar a degradar a tu pareja y
menos a los golpes, una vez que se dan se pierde el respeto.
Recuerda: el amor no es más que un
concepto, la pareja necesita mucho más.
A veces la pareja toma mucho alcohol o
consume drogas que generan problemas en la pareja y pretendemos que podemos
cambiarlas, mucha gente necesita tocar su fondo, y a veces lo mejor es huir, sobre
todo si esta relación te hace daño, se llegan a insultos y golpes.
Se tiene una expectativa del ser que
será amado, alguna idea, puede ser color de piel, nivel socioeconómico,
valores, cualidades, y cuando uno se topa con alguna característica se empieza
a idealizar a la persona.
Entre más personas más experiencias,
tendremos mejores relaciones interpersonales.
El amor puede o no sentirse. Como
únicos cada quien siente el amor de diferente forma.
Este adoctrinamiento involuntario que
hemos sufrido desde pequeños han naturalizado estos conceptos y se nos han
encarnado estas idealizaciones culturales han logrado crear un estereotipo que
nos costara mucho vencer y superar.
Estar enamorado es estar "En
Amor", eso significa amor puro, paz, libertad... no presunción.
El amor es unión, es el perfecto
conocimiento y aceptación total de que todos estamos conectados, que somos
parte de una unidad mucho más compleja de lo que podríamos imaginar y por ende
surgen sentimientos de compasión, alegría, paz.
En el momento que logremos comprender
y vivir en el amor, todo será de diferente manera. Comprenderemos que somos
libres y no necesitamos a alguien más que nos "complete", ya que
ESTAMOS COMPLETOS, estamos viviendo en amor absoluto. Al estar "En
Amor" no tendremos más temor de nuestra vida, no tendremos la necesidad de
tratar de controlar el exterior para tener una ilusión de seguridad. Tendremos
el conocimiento absoluto de que todo se encuentra exactamente de la manera que
debe ser, PERFECTO.
4.- Encontrar a mi media naranja.
No se puede ser feliz sin pareja.
¿Cuántas veces hemos dicho
erróneamente que estamos enamorados de alguien? Y solo se han visto 1 o 2
veces, o han pasado solo un par momentos agradables.
Muchas
veces tenemos un ideal de cómo será nuestra pareja y cuando surge un ser con
algunas de esas características se nos eleva la dopamina y lo idealizamos,
suponemos que es la media naranja perfecta, pero el amor es un proceso de
adaptación, de madurez y de aceptación. Pero ¿quién ha dicho que debemos
encontrar a nuestro complemento?
Uno
de ellos fue Jean Jacques Rousseau como representante de la ilustración
(escritor, pedagogo, filósofo, músico, botánico y naturalista), escribió, en
1762, su libro “Emilio” planteo el tipo de educación que deberían recibir tanto
el hombre como la mujer. A cada uno los concibió como seres incompletos, que al
unirse serian su otra mitad. Describió a la mujer como el ser contrastante del
hombre. Presenta a Sofía como el modelo deontológico de su género y le adjudica
características de pasividad, debilidad y sumisión, exigiéndole rasgos de
masoquismo, falta de iniciativa, abandono a su agresividad y competencia, para
volcar toda su energía hacia el interés de los suyos y en especial ser
agradable al hombre.
Hemos
aprendido que el amor es darlo
todo por la otra persona, que se trata de encontrar a una “media naranja” y
suponer que los conflictos se resolverán si hay amor de por medio; en pocas
palabras, que nuestra vida tiene sentido si tenemos una relación amorosa.
Algunas
de las veces esta la búsqueda de un ser amado, no es tan sólo por no sentirse
vacío, sino por cumplir con una expectativa social de contar con una pareja.
Nos han dicho que debemos encontrar a nuestra media naranja para no sentimos
como fragmentados, que nos hace falta otro ser, sin embargo, debemos de
comprender que somos libres y no necesitamos de alguien más que nos “complete”
pues estamos perfectos.
5.- ¿Contigo pan y cebolla?
Pero cuando la economía en el hogar es escaza
o nula. Se vuelve un problema cuando no se pueden cubrir las necesidades más
elementales. O bien, Si la pareja
tiene deudas, El dinero puede ser un motivo de conflicto y separación si no se
habla claramente sobre los gastos.
¿Tengo que rescatarlo financieramente? o
¿puedo ayudarle a administrarse? Hay quienes piensan que lo mejor es ¡huir!
pero no siempre la salida tiene que ser tan drástica, quizás no puedes rescatar
a tu pareja de sus deudas, pero si puedes apoyarlo para que se haga cargo.
En
muchas parejas, el poder en las relaciones de pareja, simbólicamente está
representado en el dinero, porque muchas veces, quien decide en la relación es
el que gana más.
Es
importante hablar en pareja y sobretodo poner límites. Por tanto, únicamente con el amor no es
suficiente.
6.- ¿Me cela porque me ama?
La
mayoría de las personas los hemos sentido y se han considerado como comunes y
naturales, siempre y cuando éstos cuadren dentro de cierta medida y no falten
al respeto, sin embargo, los celos tienden a presentarse en forma exagerada y
llevar a cometer acciones violentas, contrarias al amor y a una sana vida en
común.
Los
celos enfermizos y posesivos son el argumento ideal y pasional de la violencia
en la pareja y hasta suelen ser justificados socialmente. Mucho se ha dicho que
el fondo de los celos es la inseguridad de quien los sufre y el miedo de perder
el amor, pero esto no se agota en una situación meramente sentimental, ya que
cuando una relación está gobernada por esta aprensión, se torna en una relación
de poder, en la que una o las dos partes luchan por tomar el control del
cuerpo, la mente y el alma del otro(a).
Es
necesario subrayar la irracionalidad que entrañan los comportamientos de los
celosos enfermizos y de los argumentos encubridores que usan para legitimar su
conducta, pues quien los padece puede no ser plenamente consciente de los
motivos de su actuación, ni del perjuicio que acarrea en otros, para sí mismo y
en la relación.
Cantaba
José José: “Cuando vayas conmigo no mires a nadie, que tú sabes que yo no
consiento un desaire, que me sienta muy mal que tu vuelvas la cara, cuando
tienes al lado a quien tanto te ama, cuando vayas conmigo no mires a nadie, que
alborotas los celos que tengo del aire, que me sienta fatal cuando alguien que
pasa, por un solo momento distrae tu mirada”.
De esta forma, tanto en canciones o
telenovelas, y entre otros medios, los celos enfermizos son normalizados, lo
cual de por sí resulta bastante ruin. No obstante, si ponemos más atención
podemos comprobar que es mucho más recurrente que estas expresiones hablen de
los celos que siente un hombre hacia una mujer, como una manera de
culpabilizarlas y perpetuar esta idea en la cultura. Sin duda es algo que se
viene arrastrando desde Eva, porque a las mujeres se les califica de
tentadoras, provocadoras, mientras que eso no sucede para el hombre.
Los celos suelen presentarse cuando sentimos
amenazada nuestra relación con otra persona, la cual puede ser de amistad,
amor, de pareja, familiar, laboral o cualquier otro vinculo, que percibimos que
puede quebrantarse o incluso terminar. Desde muy temprana edad son externados y
tienen que ver con un acto totalmente egoísta.
Según los estudiosos han distinguido tres tipos
de celos. En primer lugar, los preventivos o de sospecha, que tienen la función
de anticiparse ante la posibilidad de que la pareja sea infiel. En segundo
lugar, los reactivos también llamados provocados o emocionales, que son la
respuesta emocional negativa al involucramiento de uno de los miembros en una
relación con otra persona. Finalmente, los ansiosos identificados como celos
neuróticos o cognitivos, según los cuales, el (la) celoso(a) genera imágenes de
su pareja que se involucra con alguien.
Sin
embargo, en el caso del hombre macho, estos tienen que ver además con un fuerte sentido de posesión, el suponer
que las otras personas le pertenecen, en especial la pareja y los hijos, y
estos son un medio de control, además, de ser una extrema absorción del uno con
el otro. Existe la premisa de que se puede disponer de la voluntad de los demás
sin ninguna reserva, es decir, se supone que es un estado deseable, aceptado
con gusto por aquellos en los que recae y hasta una manera de hacer sentir
elevada valía.
Dentro de esa posesividad, el hombre machista
tiende a hacer prohibiciones a su pareja. Por miedo a perderla no le permite
ver a sus amistades o familia, abundan frases como “Tengo que cuidarte porque
te amo”. De esta manera, se tiende a controlar todos sus movimientos, saber
dónde está y con quién. Se llega a revisar el celular bajo el pretexto de ver
si sus amigos no se están “propasando” con ella, pero él se negará a que le
revisen el suyo, bajo el supuesto de que “yo no tengo nada que esconder”, al
final de cuentas es para “protegerla”. La finalidad de estos celos es siempre
tener el mando de la situación, mantener la subordinación.
“Que no llegue tarde a casa, porque tú vas a venir, que no llame nunca a
nadie, me quieres solo para ti y criticas mis amigos y mi manera de vestir, ya
no sé qué hacer para verte feliz. Que no vaya muy pintada, me controlas la
mirada y me ves como una niña, no me dejas ser mujer y yo sé que es lo que
tienes, son los celos nada más, que rara es tu forma de amar” entonaba Sonia
Rivas.
La fórmula “peculiar forma de amar” hace ver como admisible la conducta
de un machista, bajo la idea de un amor romántico, la cuestión es que, si la pareja no muestra celos, entonces no
hay un verdadero amor. De esta manera, el hombre que no finge por lo menos
sentirlos, y no se comporta lastimosamente como si en verdad los sintiese, es
desdeñado e insultado.
La triste realidad es que muchos hombres han
asesinado, escandalizado y destruido sus hogares porque la sociedad y su
educación conspiraron para conducirlos a esa conducta tan desdichada. La moral
celosa no es considerada igual entre las diferentes clases sociales, ciudades,
niveles culturales y educativos, contextos religiosos, rango de edades, sin
embargo, un común denominador es que detona violencia física, psicológica y
patrimonial, envilece la condición humana y acaba por abatir la confianza y la
decisión de estar juntos.
Como en el caso de la obra de Otelo de William
Shakespeare, donde Yago empieza a insinuarle que Desdémona le es infiel con
Casio. Y entre él y su mujer hacen evidente la infidelidad de Desdémona ante los
ojos de Otelo. Convencido de que su esposa le es infiel, Otelo la mata
estrangulándola.
Efectivamente, los celos afectan la relación de
pareja y paulatinamente van alterando la autoestima de ambos, al tener cada vez
menos identificación y forma de cumplir las expectativas mutuas, ya que al
asociarse con la angustia, a menudo desembocan en enojo contenido, expresado en
violencia y si dura lo suficiente, depresión y pocas ganas de vivir. También,
cada pequeño incidente se hace más grande de lo que es, por la suspicacia,
malos entendidos e interpretaciones que no se hablan ni se resuelven con
consenso.
Se llega a pensar que los celos como cualquier
sentimiento podrían ser buenos sí logramos comprendedlos y controlarlos para
motivar el mejoramiento de las relaciones, lamentablemente en el mundo machista
tienden al lado opuesto, generando violencia contra las mujeres.
7.- La
protección
Creemos
que la protección es amar, y no dan espacio a que uno experimente y viva su vida. esto es, la idea de cuidar a la otra persona, estar al pendiente ahora con el celular, la idea que transmiten es saber donde estas para que en el momento que te pase algo ir a protegerte, en este caso tendría que ser un guardaespaldas pegado las 24 hrs. no quiero que te pase algo, que te roben, que te caigas, que tropieces, que
8.- ¿El
amor es para siempre?
Las personas vamos evolucionando no somos los
mismos desde que teníamos 2, a 5 , 12, 15, 18 años.
El amor se va transformando, cambia, y
hay que adaptarse a eso: si no, estamos perdidos.
No es
amor si tu pareja te hace bromas hirientes, te cela en exceso, te humilla en
público, te descalifica, es decir, te hace sentir menos. , te chantajea, te
miente, te amenaza, te ignora, te ridiculiza, te culpa o te hace sentir
culpable de todo
9.- Amarse
a sí mismo.
Existen personas más sensibles a los dictados
sociales o de la moda que se dejan impresionar por ellos. De este modo suponen
que si no tienen algún artículo de lujo, ell@s no valen. Incluso, tienden a
regalar objetos “lujosos” porque la otra persona se “lo merece” o lo “vale” o
los exigen pues es una manera de saber que es importantes para los otr@s.
Algunas de estas personas han asimilado que primero se debe pensar en los demás
y luego en ell@s, pues la sociedad nos dicta que no debemos ser egoístas y por lo
cual debemos pensar primero en los
demás. Generalmente cuando algún familiar se enferma inmediatamente nos
preocupamos por él y buscamos todos los remedios posibles, pero cuando uno
mismo se enferma dejamos para después la cura, pensamos que al rato va a pasar
el malestar o que no es necesario acudir al médico.
Desde niños nos enseñan a no ser egoístas y darles a otros
nuestros objetos, (dulces, ropa, aparatos electrónicos, juguetes, etc.), pero
el compartir no es el problema sino más bien el hecho de dar todo a los otros
hasta el punto de anular a la propia persona. Es cuando algún amante dice dar
todo por la persona amada y se queja de no recibir nada a cambio.
La religión nos dice ama a tu prójimo como a
ti mismo, pero, ¿cómo amar al otro si se hemos aprendido a derogarnos? ¿Cómo
amar al otro si no nos amamos a nosotros mismos? .La sociedad nos dice que la
“buena educación” es no pensar en uno mismo.
La sociedad, sobre todo los medios de
comunicación, a cada instante nos recuerdan que no amemos a nuestro cuerpo.
Cuántas veces hemos pensado o dicho que no nos agrada alguna parte de nuestro
cuerpo, cómo es: el tipo de nuestro cabello, que si es rizado se desea lacio,
que si tenemos demasiado largas o cortas las piernas, que el tipo de ojos, el
color de la piel, etc. No es fácil
ponernos a pensar que parte es la que nos gusta de nuestro cuerpo, ya que la
televisión nos bombardea con anuncios de lo imperfecto que es nuestro
cuerpo, ya sea un abdomen abultado, no poseer una dentadura perfecta, y así
podemos encontrar miles de ejemplos donde los comerciales nos exigen un cuerpo
perfecto que no existe. La industria y la sociedad nos envían constantemente
mensajes para avergonzarnos de nuestro cuerpo y tenerlo que disfrazar con algún
producto.
Y no es que tengas un excelente cuerpo, tu
eres tu cuerpo y el que no te guste alguna parte no significa que no te aceptes
a ti mismo como ser humano, puede que ese fragmento de tu cuerpo sea fácil de
modificar como el abdomen con dieta y ejercicio, pero aquellas otras que
desapruebas y que no pueden ser modificadas, como el color de la piel, pueden
ser vistos bajo una óptica diferente. Se puede descubrir las ventajas de
nuestro cuerpo, por ejemplo, que beneficios tiene ser alto, ser bajo, ser
delgado, tener las manos largas o cortas, podemos encontrar un sinfín de
utilidades que tiene nuestro cuerpo.
El amarse implica el amar el propio cuerpo y
la posibilidad de disfrutar del mismo. Gozar de ser uno mismo. Si alguna vez
has odiado tu cuerpo o has actuado de una forma que no te ha gustado, no lo
veas así, piensa que eso te inmoviliza y te perjudica, aprovecha que eso te
sirvió de aprendizaje y no los asocies con tu autoestima. ¿Cómo puedes dar amor
si no te amas a ti mismo?
10.- Definición de amor.
La capacidad y la buena
disposición para permitir que los seres queridos sean los que ellos eligen por
si mismos sin insistir en que hagan lo que a ti te satisface o te gustase.
Respetaremos las decisiones de todos
viéndolos como un ser más que desea tener cierta experiencia en esta vida y no
es nuestro lugar entrometernos, ya que meternos en la vida del de enfrente es
no tomar responsabilidad por la propia.