martes, 29 de marzo de 2016

IR AL PSICÓLOGO NO ES DE LOCOS.

Es curioso que cuando una persona decide ir con un psicólogo, la gente que tiene alrededor le dice “¿a qué vas? Si no estás  loco. O bien cuando se le recomienda ir al psicólogo las personas piensan “YO NO ESTOY LOC@”, Y a manera de observación les digo que no existe un diagnóstico  como LOCO(A). Sin embargo, esa palabra la utilizamos coloquialmente para describir a las personas cuyas conductas no somos capaces de comprender, suponemos que el resto de la población debe de actuar, sentir y pensar de la misma forma que uno mismo lo hace. También la utilizamos  cuando los otros osan hacer lo que uno no se atrevería a realizar.
Algunas personas llegan a mencionar que “tan solo están pasando por un mal momento”, y efectivamente están pasando por un periodo difícil que les causa estrés, y si éste  se intensifica puede causar daños a su salud. Es en esos lapsos de la vida cuando se necesita de ayuda. La función del psicólogo es acompañar a la persona a encontrar su propia respuesta y que se reconforte a sí mismo para que aprenda a enfrentarse a situaciones extremas. Aunque algunas personas, en algunos casos desean saber si están en lo correcto o no. Todos somos seres humanos que en nuestra vivencia diaria pasamos por situaciones límite y en esos instantes requerimos de alguien que nos apoye para superar lo mejor posible, ya que hasta este momento no se ha podido sentir bien con su forma de proceder.
De esta manera,  cuando no distinguimos la B de la D, vamos al oculista. Si nos duele la espalda, acudimos al fisioterapeuta. Llevamos a los niños al pediatra, al dentista para que nos atienda la boca... ¿Pero a quién acudimos cuando la vida nos supera, o no sabemos cómo afrontar ciertos problemas? Y es que una de las funciones del psicólogo es ayudarnos a comprender lo que nos está pasando. Considero que la persona que está consciente que tiene problemas es la que va y busca ayuda de un psicólogo o psicóloga y no aquel que esta “loc@”.
 Hace años que el psicólogo ha dejado de ser algo para la “gente que no está bien de la cabeza” y mucha gente piensa que todos los psicólogos tienen su diván y el paciente se pone hablar y hablar de su niñez, otros suponen que el psicólogo tiene todas las respuestas y nos dará el consejo acertado para resolver todos nuestros problemas, tan solo hay que seguir sus órdenes.  Pero no todos los psicólogos trabajan de igual forma, todo dependerá de la escuela psicológica de donde procedan.
Algunas personas tienen la idea que los psicólogos están “loc@s”,  pero esto es  como decir que los doctores se vuelven enfermos, los ingenieros no dejan de hacer ecuaciones, el médico forense se vuelve cadáver, etc.
Termino con esta reflexión que encontré:
Yo prefiero a los locos, los sensibles, los ingenuos, los soñadores, los ilusos.
Yo me quedo con los rotos, los heridos de amor, los que sangran melodías, los que lloran poesía, los que pintan sonrisas, los que todavía creen en utopías.
Me quedo con aquellos que se atreven a seguir soñando, propagando la esperanza e invitando a enamorarse.

Yo me quedo con ellos,  los que no se doblegan ante la frivolidad y la apatía, con los que se sienten y vibran, con los que aman todavía. ANONIMO.

jueves, 24 de marzo de 2016

SE APRENDE A SER HOMBRE

Hace unos días escuché a un hombre casado decirle a uno recién:   “Te recomiendo pegarle a tu esposa para que sepa quien lleva las riendas y para que después no te la haga de pedo”.  Pero recordé que también he oído -“A ese niño lo estás haciendo muy faldero, lo vas a hacer maricón”; “chíngate a tu hermana por no obedecer”; ”Compórtate como todo un hombre”;” Tendrás que aprender a ser el protector y proveedor de tu familia”; “Vieja el último”; ”Los hombres no lloran”; “El color rosa es para las niñas, ¿Acaso eres niña?; “Cuida tu dignidad de varón”.
Cuantas veces  hemos escuchado estas frases,  con las cuales el hombre va aprendiendo a ser “hombre” como lo dicta nuestra sociedad. Según el pensamiento convencional los varones deben cumplir con las expectativas de ser un “hombre”, por su “supuesta” naturaleza, ser más fuerte, no mostrar debilidades, ni expresar sus sentimientos,  estar siempre seguro de las cosas que hace, ser competitivo, ser violento, agresivo, exitoso, poderoso, ser el soporte de la familia, así mismo se le asigna el puesto de jefe, hasta tal punto de hacer sentir a su mujer que  ella le pertenece. Se le enseña a reprimir sus emociones lo que llega a generar conflictos internos que se expresan por medio de la violencia, disfunciones sexuales o adicciones socialmente toleradas como el alcoholismo.
No puedo concebir la construcción de la masculinidad en la actualidad, sin la fabricación  del papel que se le impone a la mujer y que constituye la contraparte de todo ese orden de ideas y actitudes.  Así como, el hombre, desde que nace tiene que demostrar que es hombre a través de los actos cotidianos, a la mujer se le educa para ser sumisa,  insegura, dependiente y para ser servidora, es decir, servidumbre del hombre, ello posibilita y se convierte al mismo tiempo en razón de ser del comportamiento machista del hombre.
Algunos varones, de acuerdo a su historia de vida, no se sienten capaces o no están de acuerdo en seguir reproduciendo estos patrones, sin embargo, tanto hombres como mujeres los tienden a rechazar, si, aun cuando son las mismas mujeres las principales afectadas. Dichos varones se vuelven  motivo de burlas, con expresiones como “eres un mandilón” “un cobarde” “poco hombre”,  ya que son sancionados por no “comportarse como hombres”. Por el lado, de la acción afirmativa, tampoco  están social y legalmente establecidos mecanismos e incentivos para reconocer o  allanarles el camino a los individuos que deciden asumir nuevos roles como el cuidado de los hijos, de los padres, el cuidado de la casa.
Ser “hombre” o ser “mujer”  está vinculado a ideas arraigadas y que resultan convenientes para algunos que se han ocupado de que permanezcan en nuestra herencia cultural,  no es algo que sea inevitable o propio de nuestra naturaleza, sino algo que aprendemos, por ello  debemos abrirnos  en los espacios cotidianos de nuestra relación con la gente que nos rodea y reflexionar, discutir y allegarnos de más información.

En memoria de José Esteban García Amador

LO IMPORTANTE DE LAS CARICIAS.

 En una obra de teatro, la actriz  Susana Alexander comento que los senos de la mujer fueron modelados para ser acariciados, no para ser exprimidos como si fuesen unas naranjas. Efectivamente años tomo la evolución humana para diseñar unos senos redondos, más que para la función de amantar como los demás mamíferos. Estos son para ser rozados como si se tocara un delicioso durazno.
Para muchas mujeres las caricias son esenciales para alcanzar una satisfacción sexual, ellas reaccionan a los estímulos del tacto, a las caricias suaves o más enérgicas de quien aman. Las relajan y las preparan para hacer el amor, entran en juego las palabras tiernas y dulces, la confianza y el afecto.
Sin embargo, muchas mujeres suponen que los hombres están desinformados sobre sus deseos sexuales y es que para muchos de los hombres su educación sexual ha sido orientada desde la infancia a la prohibición de las caricias, se les ha hecho suponer que las caricias son signos de debilidad o tienen miedo de parecer afeminados.
A algunas mujeres les avergüenza  hablar de sus deseos, sienten que no se saben expresar, o les da miedo ser humilladas si lo platicaran. Y esa necesidad de expresarse es tan importante como las caricias para que ellas se sientan que existen, que son tomadas en cuenta. Lamentablemente estas mujeres se toparon con el estereotipo masculino donde se supone que el hombre no deber tener dudas, ni inseguridades sobre la sexualidad. Se supone que un hombre “verdadero” sabe cómo hacer bien el amor.
 El varón al  privarse de expresar sus sentimientos suponen que lo esencial es el coito y saberlas satisfacer. Encerrados en su estereotipo sexual, toman posesión de la mujer como si fuese un objeto y él es quien disfruta y los dos seres acaban por ser lastimados. Pero hay otros modos de amarse que proporcionan orgasmos, pero que para ellos pareciera inconcebible. Al  hombre se le ha enseñado que el único placer es la penetración.
Si bien muchos varones durante el noviazgo se muestran cariñosos y aún durante los primeros meses del matrimonio es solamente como un preámbulo para tener relaciones sexuales. Con el nacimiento de los hijos estas se hacen cada vez más espaciadas y en privado, según él por respeto a la sociedad y a los críos. Esto fomenta  que a las mujeres se les vayan quitando las ganas de tener relaciones, incluso desear no tenerlas.
Las mujeres sienten placer a lo largo y ancho de la piel, no han olvidado que el tacto es uno de los cinco sentidos. Es sentir con los dedos, con la boca, con el cuerpo, apretar contra sí, abrazar y mimar es un medio de conocimiento y de intercambio con el otro. A veces un abrazo dice más que una carta de amor.
Si viéramos a nuestros progenitores abrazarse y besarse desde niños con dosis de dulzura y pasión,  aprenderíamos a ser más cariñosos con nuestros padres, hijos y pareja.


EL ORGASMO FEMENINO ES PARA DIVERTIRSE. Dinitia Smith y muchas mujeres


 ¿Algunas mujeres me han preguntado porque los hombres se duermen después del coito?
La mujer después de alcanzar un orgasmo, si es estimulada puede volver a obtener otros, el hombre después de alcanzarlo entra en un periodo de receso que se conoce como Periodo Refractario, es una fase de no respuesta, de recuperación del esfuerzo realizado y que puede durar desde minutos hasta varias horas o días, sin importar lo variado o intenso que pudo haber sido el juego erótico, pues tras la eyaculación actúan varías hormonas, entre ellas la prostaglandina, que impide al varón responder a un nuevo estímulo erótico. En cambio, para la mujer este periodo es tan breve que en segundos puede estar lista para un nuevo encuentro sexual. El hombre puede tener al menos un orgasmo al día y hasta pudiera ser  todos los días, en cambio la mujer por su capacidad  multiorgasmica puede quedar satisfecha por varios días.
En La década de 1960, Masters y Johnson investigaron el orgasmo humano  y crearon el término del ciclo de la respuesta sexual humana. Lo que encontraron es que la respuesta sexual comienza con la excitación donde se produce una vasocongestión del  área pélvica. En los hombres se registra como erección del pene y en las mujeres como lubricación vaginal, hay cambios en los labios mayores y menores, el clítoris muestra un aumento de tamaño. Tanto en varones como en mujeres se presenta una erección en las tetillas, pero algunos hombres sienten pena o suponen que “no es de hombres” el sentir placer cuando su compañera sexual les acaricia sus pechos y juega con sus pezones, sin embargo,  al igual que los senos de la mujer, que fueron moldeados para ser acariciados, los de ellos son también fuente inagotable de placer porque están llenos de vasos sanguíneos y terminaciones nerviosas que los hacen muy sensibles al tacto. Esto es lo que nos sucede cuando estamos en lo que conocemos como “faje”. En este momento si somos interrumpidos, no pasa nada y  todo puede llegar fácilmente al estado inicial.
Si la estimulación continua, se pasa al siguiente periodo llamado Meseta, este periodo puede ser tan duradero según lo desee la pareja, pueden extenderse en el juego erótico y disfrutarlo. Va subiendo la temperatura corporal, la respiración se hace más rápida, la acumulación de la tensión va subiendo y el flujo de la sangre aumenta en los genitales hasta un máximo. Durante estas fases la pareja puede jugar, puede pasar de los besos y abrazos, podemos extendernos o acortar tiempo antes de llegar al orgasmo. En este periodo si hay una interrupción,  todo puede volver a la fase de inicio.
Una vez pasado las fases de excitación y meseta, se llega el orgasmo, donde  las pulsaciones y la respiración llegan a la máxima frecuencia e intensidad, se produce una gran tensión muscular y contracciones en la zona ano-genital. Estas  contracciones son  involuntarias y en ambos sexos se tiene la misma capacidad física para sentir esta experiencia subjetiva, en la cual se descarga la tensión sexual acumulada durante la relación sexual. Es una fase liberadora tanto de la tensión como de la vasocongestión. Pero si llegando a este punto, por alguna razón es interrumpido bruscamente y la vaso congestión no es liberada y en los hombres puede producirse un dolor en los testículos. En cuanto a la mujer, tanto como Kinsey y Masters y Johnson demuestran que la mujer que no logra el orgasmo después de la excitación, permanece en una prolongada congestión pélvica, que le produce una sensación molesta y en ocasiones hasta dolorosa, aunada a una inquietud, irritabilidad y malestar en general.
Después del orgasmo, el organismo vuelve a su estado de reposo, la respiración, la temperatura corporal, la tensión y el flujo de la sangre poco a poco van regresando al estado inicial.      

Pero todo esto no tiene sentido sin lo más importante, el Deseo. Este es el mejor afrodisiaco que pueda existir, es quien desencadena todo el placer sensual, el ver a la persona que nos gusta y sentir  esa ansiedad por estar junto a quien  nos atrae  y que somos  correspondidos, y tanto hombres como mujeres lo experimentamos. 

martes, 22 de marzo de 2016

SEXUALIDAD EN DISCAPACIDAD


La sociedad victoriana puso las bases para que las relaciones sexuales fuesen exclusivamente para la reproducción, hasta se tenía que pedir permiso al rey para tenerlas (FUCK, fornication under consent of the King *), las energías empleadas al disfrute sexual debían ser empleadas para el trabajo. De esta forma, la sexualidad se fue orillando al coito y no al disfrute. Además, como señala Michael Foucault todo lo referente a la sexualidad era algo de lo que no se hablaba.
A las personas con cualquier tipo de discapacidad se les empezó a generar la creencia de ser seres asexuados, y más si son niños, (a estos les llegan a considerar  ángeles), anteriormente a los críos que nacían con una discapacidad eran considerados como débiles mentales o retardados mentales siendo su desarrollo más lento en comparación de sus coetáneos, incluyendo su despertar a la pubertad.
Alrededor de estos se generaron prejuicios en torno a su sexualidad que oscilan en los extremos desde creer que por su condición no presentan necesidades de afecto y vida sexual; la “sobre-sexualización “, es decir, que su sexualidad esta exacerbada y no tienen un control, demostrando ciertos comportamientos sexuales en lugares públicos. Y por último, buscar la manera de evitar que tuvieran relaciones sexuales por el temor de transmitir genéticamente alguna lesión a su descendencia.
Tanto los impúberes como las personas adultas, es decir, todas los seres con discapacidad exploran su cuerpo, se interesan por relacionarse con sus compañeros o compañeras, establecer lazos afectivos con su familia y amigos.
En cuanto a los adultos que están  sin movimiento parcial o total de las extremidades. Me hace recordar la novela que en el año 1928 el escritor David Herbert Lawrence escribió “el amante de Lady Chatterley “ (libro que fue prohibido en aquella época por sus escenas eróticas).  Relata la vida de Constanza, una mujer de 23 años casada con sir Clifford, quien durante la I guerra mundial es herido y queda paralitico e impotente. En esa época donde las relaciones sexuales estaban destinadas a la procreación y él sin poder tener una erección, le da permiso a su esposa para que se busque un amante, no sin antes  resolver él sus conflictos de hombría. Ella termina enamorándose del guardabosque, un hombre de modos rudos y apasionado.
Si tan solo ellos hubiesen comprendido que el acto sexual no implica la relación vagina-pene, tal vez hubiesen tenido que explorarse mutuamente para vivir una sexualidad más satisfactoria. Las personas con hemiplejia también experimentan deseo sexual, pero su orgasmo no radica en el pene o la vulva, sino sus sensaciones están distribuidas en el resto de su cuerpo, (para algunos los pezones son orgásmicos), pero también pueden dar placer a su pareja y disfrutarlo. Sin embargo, muchas personas con discapacidad están llenos de dudas y temores, que tanto para ellos como para los demás les  es muy complicado  llevar una relación de pareja,, así que aparte de soportar su estado físico, tiene que soportar el psicológico y su soledad.
Hasta hace unos pocos años, he visto dos películas que plantean esta situación del disfrute en personas con esta discapacidad. Una de ellas “seis sesiones de sexo; con  Helen Hunt y John Hawkes.” y “amigos” una película de Olivier Nakache y Eric Toledano.


*En el siglo XVI la gente se casaba y era permitido tener relaciones sexuales cuando el rey lo permitia.

viernes, 18 de marzo de 2016

ME ENSEÑARON LA VERGÜENZA


Me enseñaron a avergonzarme de mi cuerpo, de mis actos, de mis pensamientos.
Me enseñaron que lo que pienso es absurdo, que lo que hago es ridículo, que lo que deseo es sucio.
Y aprendí a no decir lo que pensaba, por vergüenza de que alguien a mi alrededor pensara algo mejor.
Y aprendí a no hacer lo que me apetecía, por vergüenza de que alguien a mí alrededor creyera que era inoportuno.
Y aprendí a no perseguir lo que deseaba, por vergüenza de que alguien a mí alrededor opinara que era inapropiado.

No contenta con someterme a la mirada externa, me plegué también a la vergüenza ajena.

Y aprendí a preguntarle a la vergüenza cómo vestirme, no vaya a ser que alguien pensara que voy buscando gustar, destacar. Y aprendí a escuchar a la vergüenza al desnudarme, no vaya a ser que me sintiera cómoda en mi cuerpo, y me acostumbrara a enseñar(me)lo sin miedo. Y aprendí a consultar con la vergüenza antes de abrir la boca, no vaya a ser que dijera sin filtro lo que me pasa por la cabeza, y se enterara la gente.

Y dejé de bailar, de reír a carcajadas, de rascarme el culo, de preguntar lo que no entiendo, de opinar lo que pienso, de compartir lo que siento, de pedir ayuda, de ponerme faldas, de ir a la playa, de comer o llorar en la calle, de ir sin sujetador, de pintarme, de salir sin pintar, de bajar a la calle despeinada, de usar esa ropa que dicen que no me pega nada, de llamar a quien echo de menos, de tomar la iniciativa, de decir que no, de decir que sí, de quejarme, de vanagloriarme, de estar orgullosa, de admitir que estoy asustada.

Y, a base de sentirme cada día más avergonzada, entendí que mi vergüenza nunca iba a sentirse saciada. Que toda la vida iba a imponerse entre yo y mi representante impostada. Así que busqué a mi sinvergüenza interna. Y le costó salir un poco, le daba vergüenza. Pero acabó sacándome a bailar, haciéndome dúo al cantar, saliendo conmigo a la calle con la cara sin lavar, animándome a hablar, a ignorar las cosas que me deberían avergonzar...


Y ahora no tengo tiempo para sentir vergüenza. Estoy ocupada viviendo.


desconozco el autor.

lunes, 14 de marzo de 2016

¿VIDA DE COLOR DE ROSA ?

Muchas mujeres se casan o viven en unión libre, suponiendo que podrán ser consideradas adultas y poder tomar decisiones; que su vida será “color de rosa” y así podrá escapar de la autoridad  paterna, y en algunos casos para no llegar a ser una “quedada”. Algunas de ellas, por desconocer el funcionamiento de su cuerpo quedan embarazadas y asumiendo sin más la maternidad. Regularmente su primera relación sexual la practican en la mayor de las ignorancias y esperando por lo menos, mucha ternura de parte de su pareja, que regularmente lo que busca es sólo el trofeo para presumir a los amigos.
 Una vez que ellas aceptaron su embarazo, tuvieron que enfrentar la descalificación de la pareja o bien de los posibles suegros que inquisidoramente le preguntan “Estas segura que, él es el padre “. Cuando generalmente, o fue su primer novio o fue el primer hombre con quien tuvo su primera relación sexual. A veces han tenido un noviazgo corto y en contra de sus familiares, que no aprobaban la relación. Así sin conocer más hombre que el actual esposo pasan de la autoridad paterna a la conyugal.
 Nadie les explico que el matrimonio acarrea una serie de responsabilidades y como no recibieron información sobre la sexualidad, no sospechaban que el casarse implicaba tener relaciones sexuales, las desearan o no. Para algunas, las madres las alertaron, sobre la infidelidad del marido, pero que a pesar de ello,-según su consejo-, tienen que “cargar con su cruz”, deben  soportar golpes, humillaciones y maltratos.” El matrimonio es para toda la vida”, eso les sentenciaron.  Así sin conocer más hombres que con el que se casaron, no tienen punto de comparación, salvo algún novio anterior, en caso de haber tenido esa oportunidad.
Una de sus grandes preocupaciones es la economía familiar, siendo la causa principal de las discusiones, cuando el dinero no alcanza para satisfacer sus necesidades, tales como los gastos para cubrir la escuela, el transporte o bien enojos con los hijos cuando les piden para la compra de juguetes o dulces y que ellas no cuentan con el capital para adquirirlos.
Se quejan de que sus maridos no valoran el trabajo doméstico, no reconocen el tener la casa limpia, el lavado y planchado de la ropa, la preparación de la comida, el aseo de los hijos, ser enfermeras, costureras, meseras, educadoras, recamareras  etc. Aunado a esto, no se les toma en cuenta su opinión para las decisiones familiares. Con el tiempo, las relaciones sexuales se han vuelto monótonas y cada vez más espaciadas, hasta el punto de preferir no tenerlas.

Para algunas de ellas,  “Hasta que la muerte los separe” se realiza su liberación.  

LABOR DE MADRE

Algunas mujeres mayores de 55 años, su mayor preocupación sigue siendo sus hijos o hijas, en especial cuando oscilan entre los 18 y 30 años de edad, ya que generalmente éstos viven aún con ellas; algunos todavía están estudiando u otros están trabajando, pero difícilmente aportan a la economía familiar. Por lo general, no participan en las labores de la casa. Lo poco que ganan, se lo gastan comprando ropa o en diversiones.
Discuten con ellos por no tener su cuarto limpio y arreglado, aunque evitan asearlo ellas mismas, sin embargo, siempre tienen la idea: “¿no les dará pena traer a sus amigos a su cuarto y que vean ese tiradero?”. Sus pequeños les reclaman que quieren ser independientes, y a ellas les gustaría que se lo demostraran, pero continúan resolviéndoles los problemas a sus retoños.
Son las clásicas madres que continúan lavando y planchando la ropa de los hijos e hijas; y siguen preocupándose por sus alimentos. Se mortifican si no comen en casa o aún dejarlos sin comida preparada para cuando ellas no están en el hogar, como si ellos no fuesen capaces de prepararse algún taco o salir a la calle a comprarlo. Se inquietan si sus jóvenes no llegan a dormir a casa, donde el límite para llegar es la 1 a.m., aún los fines de semana, en cuyo caso, les gustaría que por lo menos sus críos se reportaran para decirles que están bien y que llegarán un par de horas después, pues tienen miedo de que sufran un accidente.
A veces, aunque su aportación sea pequeña, los descendientes les reclaman a las madres por no tener “sus cosas listas”. Muchas veces éstas prefieren no discutir con ellos para no molestarlos o que las amenacen que se irán de la casa. Ellas piensan que el deber de las hijas y los hijos es estar con ellas, diciendo: “¿quién los va a tratar mejor que yo?”; o bien recapacitan: “para que ellas no estén solas en su vejez”.
Ellas siguen tratando de complacerlos, casi en todo, para no sentir que son unas “malas madres”. A algunas les gustaría que sus hijos las siguieran obedeciendo “toda la vida”.
En una sociedad como la nuestra, donde el papel de madre tiene un gran peso en la vida familiar, se les hace difícil soltar a los hijos, aun cuando ellas de jóvenes quisieron ser independientes, y ahora que ellas ya pueden tomar sus decisiones y que se sienten más libres, reproducen la misma educación que han recibido de sus madres, al suponer que ellos no saben tomar sus propias determinaciones.

Ellas han aprendido que deben de proteger a sus hijos de todo mal, de las enfermedades, de las caídas, de los golpes, ya que a través de diferentes medios han impuesto esa manera de pensar y suponer que con eso son “buenas madres”, pero esa protección no les permite a sus hijos enfrentarse con sus propios problemas y buscar al menos un consejo de los padres para enfrentarlos. Sus hijos ya tienen los valores y las bases que sus padres les enseñaron, ahora les toca a ellos experimentar, tal vez como lo hacen en otras sociedades, que los padres expulsan a sus hijos del nido familiar, cuando estos cumplen la mayoría de edad y dejan que ellos se enfrenten a la vida cotidiana.

¿TENGO LA CULPA DE TODO ?


Recuerdo que cuando éramos niños y nos llegábamos a tropezar o  a pegarnos con cualquier objeto, alguna tía corría a socorrernos y a culpabilizar  al objeto por “malo”, por haberse cruzado en nuestro camino y hacernos daño. Sin duda alguna, su intención era aminorar nuestro dolor y que dejásemos de llorar, pero fue una  forma de aprender  a culpabilizar a  otros por lo que nos sucede. Dejamos a un lado, nuestra parte de responsabilidad de lo que nos llega a ocurrir y de esta forma culpamos a otros de lo que nos pasa. “si me enfermo es por tu culpa, o por tu culpa no hice esto, por tu culpa me paso lo otro, ¡por tu culpa!”. Es tan fácil adjudicarle a otro la responsabilidad  de nuestros actos. Pero esta acción de culpabilizar es una forma  de chantaje para utilizar al otro y forzarlo u obligarlo a que haga lo que deseamos. Nos hacen sentir culpables de las responsabilidades de otros. Como cuando alguien nos pide un favor, y nosotros no podemos hacerlo. Nos entra un sentimiento de culpa, pues suponemos que no estamos actuando de acuerdo a nuestras normas morales y sobretodo religiosas. Y la otra persona, supone que siempre obtendrá un si como respuesta, incluso se molestan si no podemos hacerle el favor.
 El sentimiento de culpa es uno de los mayores problemas que invaden nuestra vida y que no nos permiten ser felices. Desde pequeños nos aturden con este sentimiento, demostrándonos que todo lo que hagamos repercute en la vida de los otros, aun si lo que hacemos es tomar una decisión personal para nuestro beneficio. Nos enseñan a entender la vida en base a obligaciones y responsabilidades.  Nos educan para depender de los otros de una forma enfermiza. “No hagas ruido porque tu papa se enoja”, “pórtate bien para que mama esté contenta”.
Todo esto alimenta un círculo vicioso de infelicidad donde la felicidad individual parece no ser importante. Las consecuencias pueden ser muy graves para la auto valoración de quién padece esta culpabilidad cultural extrema. Esto es, se tienen sentimientos de culpa por algo que hizo o que dejo de hacer,  aunque usted haya actuado de acuerdo al nivel de conciencia que tenía en ese momento. Hay gente que se siente culpable cuando no puede decir que “no” a otros. Y es que percibimos que tal vez  no estamos cumpliendo con las expectativas de los demás o realmente hicimos algo malo,  e inclusive puede ser que usted se haya traicionado por haber roto una promesa que se hizo a usted mismo.
Si usted hizo algo malo hacia otra persona, puede solucionarlo. Trate de arreglar el problema, pida disculpa y luego perdónese usted mismo y siga adelante.
Si la culpa resulta porque no está usted cumpliendo la expectativa de  alguna otra persona, piense que usted no está en este mundo para complacer ni para solucionarle la vida a los demás.
La persona aquejada de culpa constante debe aprender a aceptar el mundo tal como es independientemente de cómo  quiera usted que sea.


LA MUJER Y SU HERENCIA FRANQUISTA 2

 Esta educación que defiende la diferenciación, se basa en: SEPARACIÓN DE SEXOS FEMINIZACIÓN DE LA ENSEÑANZA Esto es así por considerar que ambos desempeñas diferentes papeles en la sociedad, por tanto hay que educar a cada uno a lo que puede aspirar. “así se pueden impartir las clases de forma adecuada para cada sexo”. Obviamente para los niños había un maestro y para las niñas una maestra. ¿Porque es así la educación? La razón se encuentra en que el nuevo régimen después de la guerra Civil quiere recuperar la Patria, por quedar tras esta guerra sin personas ni ideales que fueron atacados por las ideologías “disolventes” de la República. El periodo que dura el régimen hace que dure esta situación. “la Ley de Enseñanza Primaria permanecerá en vigor hasta 1970”
 La mujer, preocupada por su desarrollo cultural y profesional, será definida como poco femenina. Si en la etapa republicana se había aumentado el acceso de las mujeres a la educación secundaria y a la Universidad, habían desempeñado profesiones como la abogacía o la medicina, habían sido parlamentarias, escritoras y periodistas, conformando un modelo de mujer que pensaba, discutía, ejercía una profesión y votaba, es decir, habían completado su formación personal e intelectual .
 La Iglesia católica coincide en la condena a las mujeres independientes y críticas, planteando que frente a las mujeres Bachilleres, presuntuosas y sabias, deben formarse amas de casa, expertas en la práctica de su papel tradicional. El jesuita Herrera Oria condena la supuesta intelectualización de las mujeres y el abandono de sus papeles tradicionales y sugiere, además, una condena a una problemática corresponsabilidad en las tareas domésticas.
 Diferenciación de sexos en asignaturas comunes- por D. Manuel Castillo Se separa porque los objetivos a alcanzar son diferentes. Por ello hay programas distintos en Formación del Espíritu Nacional, ya que los hombres requieren una formación para la vida política pública y las mujeres para la familiar. La educación física, se enfoca para la formación de soldados en hombres, y en mujeres para formar amas de casas competentes. La música en ellos para el espíritu patriótico y en ellas sólo por cultura.
 En el campo de la Educación Física puede observarse que mientras en los hombres se trataba de una auténtica formación premilitar, en la que predominaba la resistencia física para la batalla, La de las mujeres se encaminaba a conseguir que fueran sanas, eficaces y bien preparadas para las continuas maternidades; rechazando aquellos ejercicios que pudieran acrecentar su masculinidad.
 La música solo la cursaban alumnos pequeños, reduciéndose la enseñanza tan sólo al aprendizaje de himnos y marchas militares. Sabiendo también marcar el paso militarmente. Las mujeres disponían de un abanico de posibilidades más amplias, pero sin menospreciar las marchas e himnos. En general en todas las materias se profundizaba en la virilidad del hombre y en las cualidades femeninas de las mujeres.

Algunas ideas… Catalogan el Bachillerato como escasamente adecuado para la mente femenina, mucho menos propio será la formación universitaria. La labor de las divulgadoras rurales, con formación de enfermeras y asistentes sociales, que en los barrios marginales y en las zonas rurales se encargaban de proporcionar a las madres conocimientos teóricos y prácticas de puericultura. Mujeres para Dios, para la Patria y para el hogar, es decir, cristianas, decentes, patrióticas y perfectas amas de casa
 EL AMBITO FAMILIAR
 El Estado franquista y la Iglesia materializaron sus intereses sobre la sociedad, de la que trataban de obtener el consenso, a partir de su dedicación al tema familiar. Tanto para uno como para otra, la familia era la depositaria de la ideología patriarcal y autoritaria, centro de los valores cristianos. Dentro de ella, la mujer-esposa-madre constituía el eje de esta estructura, cuyo mantenimiento se convertía en su papel fundamental.
 El prototipo de mujer, el modelo femenino que encajaba con esta misión será presentado por la jerarquía eclesiástica de la siguiente forma: debía ir convenientemente vestida, es decir, con mangas largas o al codo, si escotes, con faldas holgadas, para no concentrar atenciones indebidas. La ropa no podía ser corta ni tampoco se debía transparentar. Cuando se trataba de mujeres jóvenes, éstas no debían salir solas a los espectáculos o ir acompañadas por personas de sexo opuesto, a no ser que fueran parientes. Todo ello unido a una intensa práctica religiosa y a un objetivo claramente hogareño, del que sólo era apropiado desviarse momentáneamente por las circunstancias concretas del trabajo al que las mujeres se iban incorporando durante estos años. Esta era, además, el modelo de mujer española, explotado hasta el agotamiento.
 MODA
 También se puede conocer la forma de vestir de la clase popular y la burguesía de la época a través de diversas imágenes Dentro de este primer periodo se exhiben algunas fotografías de cantantes, escritoras o actrices, como María Guerrero o la soprano María Barrientos, y otras imágenes en las que se puede ver el protagonismo que va adquiriendo, poco a poco, la mujer en la sociedad española. Entre otras están la primera mujer ingeniero industrial y la primera mujer española con título de piloto.
 De 1940 a la Democracia Continuando el recorrido histórico que propone la muestra “Vestidas para hacer Historia”, se pueden ver imágenes de los primeros años del franquismo. -A medida que se va avanzando por el recorrido de la exposición, puede apreciarse, a través de las instantáneas, el cambio que sufrió España en cuanto a su manera de pensar y actuar. -La moda tomo relevancia en los años 60 como podemos ver aquí a jóvenes subidas a un descapotable presentando la moda Pop Art.
-En el último periodo histórico se muestran fotografías de señoras con faldas cortas, pechos desnudos, etc., como ejemplo de la liberación sexual vivida en España. -La exposición termina con imágenes de mujeres que muestran la realidad actual.
Los tratados de moral seguían dividiendo el cuerpo de la mujer, como en la Edad Media, en tres partes, según su “honestidad”.
Huelga decir que las partes honestas eran sólo las manos, los pies, la cara y los brazos hasta el codo. El resto del cuerpo femenino era menos honesto, como la parte superior del brazo, o rotundamente deshonesto, como el pecho y el vientre. Había que evitar no sólo el pecado, sino hasta su posibilidad, es decir, las ocasiones del mismo. Entre ellas estaban, por ejemplo, el baile agarrado, ir del brazo los novios, el beso, el bañarse en las  piscinas que no hubiera separación de sexos o la simple lectura de una novela: La mejor es buena para echarla al fuego, decía un libro de formación moral para las jóvenes.”
En la posguerra se promulgaron las llamadas “Normas de Decencia Cristiana “que intentaban transformar la faz de nuestra sociedad hasta extremos ridículos: Las chicas de Coros y Danzas de la Sección Femenina tuvieron que colocarse pantaloncitos debajo de las faldas para bailar; breves escotes, medias incluso en verano y en las iglesias porque ir sin ellas era signo de desnudez, mangas hasta el puño y vestidos amplios eran los signos reconocidos de decencia. Los prelados, obsesionados por “la moral de la pantorrilla “fijaron la longitud de las faldas y mangas en sus diócesis,  considerando impúdicas las mangas que no llegasen hasta el codo, los pantalones que dejaban desnudos los muslos de los niños y haciendo preceptivo el uso del velo que cubría la cabeza de las mujeres en las iglesias.
Sobre el baile…
Las citadas normas de decencia, promulgadas en 1950, eran inflexibles con el “baile agarrado” que nunca incluía el baile regional o folclórico sino los llamados “modernos”.
El baile era considerado como uno de los más mortíferos inventos de Satanás y un serio peligro para la moral cristiana: No hubo obispo que no escribiera una pastoral contra el baile y en 1950 dictaminaron que “la prensa que desee ostentar el título de católica no puede anunciar bailes ni salas de fiesta”. El cardenal Segura, arzobispo de Sevilla, prohibió el culto en los pueblos en que se bailaba agarrado, aunque fuera en las fiestas y amenazó con suspender en sus funciones a los sacerdotes que absolvieran a los que bailaban; se hicieron famosos los carteles disuasorios  e incluso un teólogo publicó un libro tras estudiar durante veintitrés años el problema del baile en el que argumentaba que baile agarrado y, sobretodo el tango, sustituían a las casas de prostitución. 
Y todo esto era así y así se enseñaba a las mujeres hace 70 años. No ha sido hace mil años ni en ningún país islámico o de Asia. Todo esto pasó en España y lo vivieron Nuestros Padres y Abuelos.

Realmente de TERROR…


LA MUJER EN LA EPOCA FRANQUISTA Y LA HERENCIA

 Joyas del FRANQUISMO Sacado del libro de la &; Sección Femenina; Formación Político Social para Bachillerato
 La Sección Femenina de Falange de la J.O.N.S. y la S.F. 1934-1959
 Su objetivo era fomentar en las mujeres el espíritu nacional sindicalista.
Su lema: El fin esencial de la mujer, es servir de complemento al hombre, formando con él, individual o colectivamente, una perfecta unidad social.  
Su ideario político era fomentar los valores tradicionales que evocaban la figura de la madre y de la esposa sumisa como prototipo femenino y la Responsable de la Sección Femenina era Pilar Primo de Rivera Educación de la falange. Esta institución se encargaba de mantener y difundir los valores falangistas del régimen de forma paralela al trabajo o la escuela. Su modelo de mujer se identifica con el de madre y su educación se dirige a formarla como buena ama de casa y reproductora, suprimiendo todas aquellas materias que resten importancia a la formación del hogar.
Las mujeres nunca descubren nada; les falta, desde luego, el talento creador, reservado por Dios para inteligencias varoniles; nosotras no podemos hacer nada más que interpretar, mejor o peor, lo que los hombres nos dan hecho. (Pilar Primo de Rivera en 1942)
 La Sección Femenina desempeñó su labor en las oficinas del Estado Mayor, en las cárceles, en las enfermerías y en los lavaderos de los frentes. Recaudaron fondos para la guerra y organizaron talleres de costura para confeccionar la ropa de los soldados.
 Los Religiosos orientaban la formación católica en la Sección Femenina. Sección Femenina de Falange Local portando la Madre de Dios del Socorro
 La vida de toda mujer, a pesar de cuanto ella quiera simular – o disimular- no es más que un eterno deseo de encontrar a quien someterse. (Medina, revista de la Sección Femenina, 13 de agosto de 1944)
 Cuando estéis casadas, pondréis en la tarjeta vuestro nombre propio, vuestro primer apellido y después la partícula “de”, seguida del apellido de vuestro marido. Esta fórmula es agradable, puesto que no perdemos la personalidad, sino que somos Camen García, que pertenece al Señor Marín, o sea, Camen García de Marín. (Sección Femenina, Economía doméstica para Bachillerato)
Extractos de Sección Femenina de la Falange Española y de las JONS -Editado en 1958. Preparación de la mujer al matrimonio Ten preparada una comida deliciosa para cuando él regrese del trabajo. Ofrécete a quitarle los zapatos. Habla en tono bajo, relajado y placentero. Prepárate: retoca tu maquillaje, coloca una cinta en tu cabello. Su duro día de trabajo quizá necesite de un poco de ánimo y uno de tus deberes es proporcionárselo. Durante los días más fríos debéis preparar un fuego en la chimenea para que él se relaje frente a él. Preocuparte por su comodidad te proporcionará una satisfacción personal inmensa.
 Minimiza cualquier ruido. Salúdale con una cálida sonrisa y demuéstrale tu deseo por complacerle. Escúchale, déjale hablar primero; recuerda que sus temas de conversación son más importantes que los tuyos. Nunca te quejes si llega tarde, o si sale a cenar o a otros lugares de diversión sin ti. Intenta comprender su mundo de tensión y estrés. Haz que se sienta a gusto que repose en un sillón cómodo. Ten preparada una bebida fría o caliente para él. No le pidas explicaciones acerca de sus acciones o cuestiones, su juicio o integridad. Recuerda que es el amo de la casa.
 Anima a tu marido a poner en práctica sus aficiones e intereses y sírvele de apoyo sin ser excesivamente insistente. Si tú tienes alguna afición, intenta no aburrirle hablándole de ésta, ya que los intereses de las mujeres son triviales comparados con los de los hombres. Al final de la tarde, limpia la casa para que esté limpia de nuevo en la mañana. Cuando os retiréis a la habitación, prepárate para la cama lo antes posible, teniendo en cuenta que, aunque la higiene femenina es de máxima importancia, tu marido no quiere esperar para ir al baño. Recuerda que debes tener un aspecto inmejorable a la hora de ir a la cama... si debes aplicarte crema facial o rulos para el cabello, espera hasta que él esté dormido, ya que eso podría resultar chocante a un hombre a última hora de la noche.
 En cuanto respecta a la posibilidad de relaciones íntimas con tu marido, es importante recordar tus obligaciones matrimoniales: Si él siente la necesidad de dormir, que sea así, no le presiones o estimules la intimidad. Si tu marido sugiere la unión, entonces accede humildemente, teniendo siempre en cuenta que su satisfacción es más importante que la de una mujer. Cuando alcance el momento culminante, un pequeño gemido por tu parte es suficiente para indicar cualquier goce que haya podido experimentar. Si tu marido te pidiera prácticas sexuales inusuales, sé obediente y no te quejes. Cuando tu marido caiga en un sueño profundo, acomódate la ropa, refréscate y aplícate crema facial para la noche y tus productos para el cabello. Puedes entonces ajustar el despertador para levantarte un poco antes que él por la mañana. Esto te permitirá tener lista una taza de té para cuando despierte.
La doble tarea de las mujeres trabajadoras. - Las mujeres que trabajan fuera de casa, estaban forzadas a llevar una doble jornada. - La mujer trabajadora casada no dispone de tiempo libre para sí misma. - Su vida pasa por una triple función agotadora: trabajadora, esposa y madre. - La incorporación de la mujer al mundo del trabajo es un paso importante y decisivo.
 Machismo en el franquismo. Tras el régimen del general Franco: La mujer era esposa, madre y reserva de los valores espirituales. Se prohibió el matrimonio civil, la contracepción y el divorcio. Se estimuló la procreación y se premió a las familias numerosas. Comparó a la mujer casada con menores de edad. Las mujeres debían abandonar el trabajo al casarse. Se prohibió que ejercieran una serie de profesiones.
 EDUCACIÓN: PRINCIPIOS GENERALES: EDUCACIÓN DE LAS MUJERES BASADA EN EL GÉNERO: DIFERENCIACION EN LAS AULAS.

 EDUCACIÓN PARA LA MUJER BASADA EN EL GÉNERO. Se parte de la posibilidad de tener hijos a la obligación cultural. Gracias a la propia cultura impuesta el falangismo, )es una teoría económica y política nacida en 1931 en España, de inspiración fascista y adaptada a las particularidades de la España de la época). y el Catolicismo. Los hombres son relacionados con la educación y la mujer con los sentimientos. Por tanto se aleja de su formación todo aquello que se considerara masculino. La educación estaba orientada desde su juventud para ser amas de casa y servir a sus maridos.

lunes, 7 de marzo de 2016

CONFLICTO ENTRE GENERACIONES

Muchos adultos mayores se quejan diciendo que “todo tiempo pasado fue mejor”,  que las nuevas generaciones son muy groseras, que las jovencitas actuales son menos recatadas que lo que ellas fueron, cada día se exhiben más.
 Ante lo cual les cito las siguientes frases:
1.-Nuestra juventud gusta del lujo y es maleducada, no hace caso a las autoridades y no tiene el mayor respeto por los mayores de edad. Nuestros hijos hoy son unos verdaderos tiranos. No se ponen de pie cuando una persona anciana entra. Responden a sus padres y son simplemente malos.
2.-Ya no tengo ninguna esperanza en el futuro de nuestro país si la juventud de hoy toma mañana el poder. Porque esta juventud es insoportable, desenfrenada y simplemente horrible.
3.-Nuestro mundo llegó a su punto crítico. Los hijos ya no escuchan a sus padres. El fin del mundo no puede estar muy lejos.
4.- Esta juventud esta malograda hasta el fondo del corazón. Los jóvenes son malhechores y ociosos. Ellos jamás serán como la juventud de antes. La juventud de hoy no será capaz de mantener nuestra cultura.
5.- ¿A quién hablaré hoy? Los hermanos son malos. No es posible querer a los amigos de hoy. ¿A quién hablaré hoy? Reina la avaricia. Todos se apropian de los bienes ajenos. ¿A quién hablaré hoy? El desgraciado se consuela con el desgraciado, porque el hermano se ha convertido en enemigo. ¿A quién hablaré hoy? No hay en quien confiar. Y los amigos nos tratan como desconocidos. ¿A quién hablaré hoy? El pecado, la plaga del país, no tiene fin.
La primera es cita de Sócrates (470-399 A.C.), la segunda es de  Hesíodo 720 A.C., la tercera de un sacerdote 2000 años A.C., la cuarta fue encontrada en una vasija 4000 años en la antigua Babilonia y la ultima es un poema egipcio del siglo VII A.C.
Podemos pensar que el problema entre generaciones no es algo nuevo, puesto que desde tiempos muy remotos se han quejado de lo mal que están los jóvenes.
Y es que ser joven es sinónimo de transformaciones. La adolescencia es un periodo de cambios físicos, hormonales, sociales y psicológicos, se trata de un proceso de autoafirmación, que suele aparecer rodeado de conflictos y resistencias, en los cuales el púber busca alcanzar su independencia. De la manera en que enfrente este periodo dependerá su autonomía y parte de su personalidad. Como padres debemos recordar nuestra adolescencia y nuestra necesidad de ser autónomos, esa búsqueda de diferenciarnos de nuestros padres. Debemos tener presente como nos hubiese gustado que nuestros padres nos hubieran tratado, pero sin olvidar nuestra experiencia obtenida. Seguramente nuestros padres pensaron lo mismo de nuestra juventud.

Ya lo dijo Salvador Allende “Ser joven y no ser revolucionario es una contradicción”.
                                                                                                  


INFIDELIDAD, ESE VISITANTE .......

Infidelidad ese visitante del que no estamos seguros de su presencia, pero que tenemos indicios que está rondando por nuestra mente.
Para muchas mujeres y algunos hombres se tiene latente la posibilidad de que su pareja les esté siendo infiel. Incluso a las mujeres el día de su boda, algún familiar les sentencia: “todos los hombres son infieles, tendrás que aceptarlo”.
Durante la vida matrimonial, algunas mujeres han sospechado que su marido las engaña con otra mujer, pues empiezan a presentar cambios en su comportamiento. Inician con tener más atenciones con alguna vecina, amiga o parienta cercana a la esposa; le brindan ayuda  en varios aspectos, desde acomedirse a trabajitos en la casa, hasta ofrecerle ayuda económica, sin importar las necesidades en su propio hogar. Hacen comentarios positivos sobre la candidata al motivo del engaño.
Aunque no tengan la certeza que su pareja les sea infiel, a ellas les genera un sentimiento de culpa porque quizás no le brindaron al marido la frecuencia o no  cumplieron con las expectativas sexuales de sus esposos.
Se sienten “burladas” ya que la mayoría de las personas con las que conviven tenían conocimiento de ello y ellas fueron las ultimas en enterarse.
Les molesta que la infidelidad sea socialmente aceptada para el hombre y no para las mujeres, pues hasta las propias madres solapan la infidelidad con frases, “tú  eres la catedral y las otras son las capillas” o “tu mujer es una fodonga, harías bien en engañarla”. Los esposos se escudan con “soy hombre, que quieres”, tienen que soportar sus desprecios y sus humillaciones por mantener una “figura paterna” en casa.
De esta forma, ni ellas ni los esposos plantean la posibilidad de separarse, todo sea por los hijos. Y, en algunos casos, terminan optando por no tener relaciones sexuales con los esposos, pues les da “asco” que ellos hayan tenido que ver con otra mujer. Otro factor por el cual no se separan, es la cuestión económica, cuando a veces, son ellas el sostén de la economía familiar.
En algunas ocasiones cuando se han separado, al pasar de los años, los maridos han regresado al lado de ellas, para que les sirvan de enfermeras.

No se imaginan que la infidelidad de sus esposos son por otras cuestiones que no tienen nada que ver con ellas.

viernes, 4 de marzo de 2016

CUALQUIER MUJER PUDE SUFRIR UNA.

Violación
                                                                     “la que se calla ante la larga fila de mujeres calladas ya no necesita opresor:
                                                                             lo lleva dentro porque ha interiorizado la ley del silencio “ Magda Bogin.
Me contaron una anécdota … Una mujer que cruzaba de Guatemala a Chiapas para trabajar en labores domésticas, de repente faltó a su trabajo por unos días. Al regresar, le preguntaron ¿qué le había pasado?, a lo que ella respondió: “fracasé”. A los pocos meses volvió a faltar y dijo lo mismo, por lo que le cuestionaron ¿a qué se refería con “fracasé”?  Ella contestó que en el camino se topaba con unos soldados y -a su modo dio a entender- que habían abusado sexualmente de ella.
En la sociedad, si alguna mujer es violada, inmediatamente se le culpa y se le juzga con frases como: “la violaron por vestirse así”, “por exhibicionista”, ”por provocadora”, “porque ella se lo buscó”. Es tanta la presión social que muchas mujeres, después de ser violadas -ya sea de niñas o adultas- se sienten culpables, creyendo toda la vida que fue culpa de ellas. Y cómo no se van a sentir de esta manera, si  la sociedad y la familia las asumen a ellas como las provocadoras. Históricamente se ha etiquetado a las mujeres como las tentadoras, las hechiceras que encantan a los hombres para que las seduzcan.
Son ideas machistas que las mismas mujeres asumen y reproducen cotidianamente, no conscientes de ello, pero que se las repiten a otras, sin considerar que cualquier mujer puede ser violada en cualquier momento. Todas son víctimas potenciales, no por ser tullidas, gordas, flacas, jóvenes, viejas, casadas, viudas o solteras estarán libres de ello.
Existe una doble moral en torno a la mujer, por un lado, los empleadores exigen a la mujer trabajadora vestir la ropa ceñida, tacones altos, maquillarse, “excelente presentación”. Podemos ver que en los comerciales utilizan mujeres de buen cuerpo, jóvenes, con ropa que les hace mostrar sus atributos sexuales, en algunos casos semi desnudas, haciendo fantasear a la mayoría de los hombres para  tener una mujer escultural a su lado. La propaganda nos dice que si usas tal producto atraerás al hombre que tú quieres y caerá rendido a tus pies.  Promueven la imagen de mujer débil, pasiva, sumisa y atractiva sexualmente.
Por otro lado, la doble moral que mencionaba, exige a la mujer que se vista recatadamente, que no manifieste públicamente sus deseos sexuales. Que se “dé a desear”, porque es  parte del “encanto femenino”, pero que defienda activamente su “honor”, lo que  para los hombres sería el premio de la virginidad. Tal pareciera que la mujer no tiene derecho a lucir su cuerpo, a usar minifaldas, escotes o ropa ceñida, mientras que a las artistas o  quienes trabajan en los medios masivos de comunicación si se les espera ver despampanantes y provocativas.
Se ha generado la idea de  que muchas mujeres buscan a un hombre agresivo, que las domine, porque suponen que así debe ser un “hombre de verdad”, pero ¿qué tanto tiene que ver con algunas novelas donde perpetúan la fantasía de que a las mujeres les gusta ser violadas, mancilladas?. Podemos ver que la mujer se resiste a quien la ataca, sea novio o desconocido, y de un momento a otro, se derrite de amor por su agresor. Se enamoran del tipo que las cela todo el tiempo y duda de ella a cada paso. El hecho que, tanto hombres como mujeres, puedan tener fantasías sexuales donde pudiera haber un grado de violencia o tener una relación agresiva o intensa, como el clásico beso mordelón, encajar las uñas, producir cierto dolor que pueda ser gozoso para ambos, no significa que desea ser violada. Una cosa  es tener una fantasía erótica  y estar en común acuerdo con su pareja, y otra ser agredida  sin su consentimiento. Una fantasía nunca significa una amenaza real de daño físico o de muerte, pero una violación sí.

Las mujeres que han sufrido de abuso sexual,  es importante que sepan que ésto se puede resolver  en terapia psicológica o con grupos de autoayuda.

jueves, 3 de marzo de 2016

EL DESEO SEXUAL NO DESAPARECE CON LA EDAD.

El deseo sexual no desaparece con la edad

Las personas maduras son frecuentemente objeto de burlas, cuando ellas quieren manifestar su afecto, cuando se besan en público o bien cuando pretenden encontrar un compañero sexual, se les cataloga como “viejo rabo verde” o “esa vieja loca”, además se trata de culpabilizar a las personas maduras cuando persisten en sus deseos y en su actividad sexual. Cuantos chistes de viejitos con referencias sexuales no conocemos.
Las personas maduras no cesan de sentir deseos ni de desinteresarse por la actividad sexual. Muchos de ellos sufren la falta de una pareja y tienen que afrontar la soledad, la declinación de la salud, el descenso de su nivel de vida, y además sentirse culpables por experimentar deseos sexuales, estos los acompañaran en hasta el fin de sus días. El adulto por ser objetos de burlas, se siente avergonzado y trata de alejar todo pensamiento sexual puede terminar por perder todo interés en su vida sexual y abandonarla.
Muchas mujeres les interesaría tener un compañero, pero tienen miedo o no quieren nuevamente comprometerse a tener una pareja y vivir juntos, pero siempre existe la posibilidad de tener un un compañero o novio que puedan con ellos expresar sus sentimientos de ternura, de compañía y hasta satisfacer sus afectos sexuales. Pero también, suponen que han dejado de ser atractivas para atraer a un compañero. Se han alejado de los cánones de belleza que manejan los medios de comunicación,(delgadez, juventud, firmeza en la piel,). En realidad tu puedes ser atractiv@ para otr@s , pues hay hombres o mujeres que no buscan la juventud en la pareja.
Está comprobado que tanto hombres como mujeres son tan capaces de mantener una vida sexual antes como después de la menopausia, incluso para las mujeres se sienten más libres, pues se liberan de la preocupación de quedar embarazadas.
Las parejas maduras que desean tener relaciones sexuales pueden practicarlas, ya que la facultad orgásmica se mantiene en la edad madura, aunque su intensidad disminuya un poco, esto es, ya no con la intensidad de un joven. La frecuencia en la actividad sexual declina lenta y progresivamente, aunque la erección del pene y la lubricación natural de la vagina necesiten varios minutos de estimulación sensual mutua y afectuosa. Y si la lubricación de la vagina es escaza, se pude utilizar algún gel lubricante para compensar.
La mujer debe comprender que una erección lenta no significa que su marido la encuentre menos seductora, sino simplemente que envejece.
Debemos de entender que la sexualidad no se encierra o se engloba solo en el coito, comprendamos que el cuerpo entero es una fuente de sensaciones de placer. Que la piel es el órgano sexual más grande que poseemos. Incluso se puede tener masturbación mutua o solitaria.
Los adultos mayores con diabetes no pierden el deseo sexual, quizás pierden sensibilidad en la piel, pero eso ni implica que no puedan llevar una vida sexual activa.

Las personas con hemiplejia también experimenta deseo sexual, pero su orgasmo no radica en el pene o la vulva, sino sus sensaciones están distribuidas en su piel, (para algunos los pezones son orgásmicos) y también pueden dar placer a su pareja y disfrutarlo. 

EL DISFRUTE DEL CUERPO

Socialmente se ha considerado al hombre como el poseedor de la capacidad de goce sexual, mientras que se cree que la mujer no tiene este impulso natural tan desarrollado, e incluso, que es nulo.
Este mito está arraigado fuertemente en nuestra sociedad y ha subsistido durante generaciones. Nuestras madres y abuelas consideran que las mujeres deben cuidar su reputación y evitar cualquier manifestación que represente seducción, pues parte del “encanto” y los valores femeninos más preciados radican en mostrarse recatadas y ajenas al placer sensual.
Ésta creencia ha llevado a muchas mujeres a reprimir sus deseos para no ser consideradas como “fáciles”, pues se inculca que de lo contrario la posibilidad de una pareja estable no es factible e incluso muchos hombres lo llegan a pensar así.
Se ha demostrado que las mujeres acumulan la misma tensión sexual que los varones y además las zonas erógenas no solo se limitan a la estimulación del clítoris y la penetración vaginal, sino que disfrutan plenamente de dar y recibir sexo oral, además de otros juegos que son considerados como degenerados por desconocimiento del gran placer que se puede experimentar al compartir con la pareja las “travesuras” que sólo se piensa pueden practicar las mujeres “fáciles”. Muchas mujeres se siguen reprimiendo a sí mismas y no se permiten expresar sus fantasías, y mucho menos practicarlas.
Se sabe que en la prehistoria la mujer gozaba plenamente de la sexualidad sin las limitaciones que ahora tiene, y con el desarrollo de la sociedad, esta capacidad de goce se fue reprimiendo por considerarlo una manifestación tan animal que se le permitió solo al varón complacerse.
Como en esos tiempos no se tenía registros, los historiadores han mencionado que en la prehistoria nuestros antepasados gozaban del sexo en grupo. Han descubierto juguetes sexuales con 28 mil años de antigüedad cerca de Ulm en Alemania, además, se menciona que Cleopatra en una noche practicó felación a cien soldados, y esto para su propia satisfacción, ya que la sensibilidad de la boca no solo se limita al beso oral.
Además, cabe destacar la capacidad de sentir placer de la mujer, que a diferencia del varón puede experimentar múltiples orgasmos durante un encuentro sexual a la vez que su recuperación entre orgasmos es más rápida que en la del varón, esto siempre y cuando no tengan miedo a dejar fluir sus sensaciones.
En el libro del Kama Sutra mencionan que hay tres tipos de hombres y de mujeres: las hay de pasión o deseo carnal débil, mediana e intensa.  A la vez hay tres arquetipos de ambos y que dependen  por el tiempo que se emplea en el acto sexual: los que invierten poco, moderado y los que emplean mucho tiempo.  Apunta que en la copula el hombre cesa por sí mismo tras la eyaculación, quedando satisfecho, lo que no ocurre con la mujer. A este respecto, ponen como objeción que si el hombre dura más, las mujeres lo querrán y lo amaran más. Mientras que si es de corta duración ellas quedan descontentas, pues  ellas siguen experimentando gran placer y requieren de mucho tiempo para calmar su deseo.
Es cuestionable, en las religiones monoteístas, como el islam, que condenaron el placer sensual de la mujer y las posiciones sexuales, incluso en algunos países de Asia, África, Medio Oriente, Europa, Australia e incluso América, practican en la actualidad  un ritual de iniciación a las niñas conocido como la ablación sexual, que consiste desde la mutilación del prepucio del clítoris hasta de los genitales externos femeninos.
Por otro lado, en la cultura occidental, se conjuntaron varios pensamientos religiosos y de orden económico- político para restringir la sexualidad exclusivamente a la reproducción. Tales como el calvinismo, los luteranos, el puritanismo y la santa inquisición, consolidándose en la época victoriana. Más tarde Freud colabora con estos prejuicios de que las mujeres sean inferiores sexualmente. Generando en ellas el sentirse avergonzadas e ineptas, ante la sociedad como degeneradas.
Lamentablemente en la actualidad, a las mujeres que se han empoderado, a pesar que estamos en el siglo XXI son mujeres juzgadas por el mismo género por vivir el sexo con libertad y plenitud. Ser simpatizante del sexo casual sigue siendo blanco de comentarios denigrantes. Algo anda muy mal en aquellas féminas que se toman el derecho de faltar al respeto a las mujeres libres.
En realidad, la mujer es cada vez más consciente de su cuerpo y, se responsabiliza del mismo. Se están rompiendo mitos y ahora ellas están abiertas al goce y se reconocen con la libertad de buscar alternativas de satisfacción, aún a pesar de lo que conlleva socialmente permitirse relaciones eventuales, compañeros sexuales y espacios de encuentro que le den la posibilidad de vivir su sexualidad.
Existen diferentes canales de socialización orientados a tener experiencias placenteras cada vez más difundidos y diversos. Lo más importante de todo es que las mujeres que están superando prejuicios y se permiten ejercer su sexualidad a plenitud, lo logran sin culpa, con curiosidad y reportan cada vez más el incremento de su autoestima gracias a reconocerse capaces de ser autosuficientes, sin los vínculos que la sociedad impone para poderse reconocer plenas.